La niña que siente.
Según el diccionario; “La empatía es la intención de comprender los sentimientos y emociones, intentando experimentar de forma objetiva y racional lo que siente otro individuo. La palabra empatía es de origen griego “empátheia” que significa “emocionado”.”
Osea que la empatía es una emoción y no un estado de ánimo temporal. Recuerdo la primera vez que simpaticé con otro ser. Tenía seis años y estaba pasando el curso en Cambridge. Durante el cambio de trimestre fuimos a “Cley next to the sea.” Está en el River Glaven en Norfolk (Inglaterra). Vi una estrella de mar descansando sobre una roca. Mis dedos estaban entumecidos y temblaban de frío; no llevaba guantes. Pero pude apreciar los bultitos de arena sobre su cuerpo blando, que parecía derretirse con mi tacto. Le di la vuelta para inspeccionar su otra cara y se le cayó un brazo. Los restantes cuatro se quedaron en mi mano izquierda.
En ese momento me sentí rara, como cuando se corren las cortinas para iluminar una sala que llevaba siglos en la oscuridad. No sabía qué nombre ponerle a esta sensación. Esta capacidad de imaginar la vida a la que tendría que acostumbrarse la estrella. Le costaría mucho, a mí me habría sido imposible. Decidí ayudarla. La metí en un vaso espacioso. Lo llené de agua salada y le troceé alga.
Esperé a que le creciera otro brazo pero murió al día siguiente.